[fusion_builder_container hundred_percent=»no» equal_height_columns=»no» menu_anchor=»» hide_on_mobile=»small-visibility,medium-visibility,large-visibility» class=»» id=»» background_color=»» background_image=»» background_position=»center center» background_repeat=»no-repeat» fade=»no» background_parallax=»none» parallax_speed=»0.3″ video_mp4=»» video_webm=»» video_ogv=»» video_url=»» video_aspect_ratio=»16:9″ video_loop=»yes» video_mute=»yes» overlay_color=»» video_preview_image=»» border_size=»» border_color=»» border_style=»solid» padding_top=»» padding_bottom=»» padding_left=»» padding_right=»»][fusion_builder_row][fusion_builder_column type=»1_1″ layout=»1_1″ background_position=»left top» background_color=»» border_size=»» border_color=»» border_style=»solid» border_position=»all» spacing=»yes» background_image=»» background_repeat=»no-repeat» padding_top=»» padding_right=»» padding_bottom=»» padding_left=»» margin_top=»0px» margin_bottom=»0px» class=»» id=»» animation_type=»» animation_speed=»0.3″ animation_direction=»left» hide_on_mobile=»small-visibility,medium-visibility,large-visibility» center_content=»no» last=»no» min_height=»» hover_type=»none» link=»»][fusion_text columns=»» column_min_width=»» column_spacing=»» rule_style=»default» rule_size=»» rule_color=»» hide_on_mobile=»small-visibility,medium-visibility,large-visibility» class=»» id=»»]
Con el objetivo de determinar los rasgos que forman el corazón del líder, en los últimos años he leído, escuchado y entrevistado un sin número de personas, en posiciones de liderazgo, Algunos en el ámbito corporativo, otros en la esfera empresarial, eclesial, deportivo y educativo, entre otros.
Entre todos, encontré un factor común que sobresale en estos tiempos de microondas y comida rápida. Todos coinciden que el líder se cocina a “baño de María”, es decir se forma lenta y persistente; no en corto tiempo y sin esfuerzo.
Cocinar un líder a “baño de María”, permite ablandar el más duro corazón para transformarlo en un ser humano amoroso y apasionado por los demás, dispuesto a enfrentar las más difíciles y largas contiendas con el objetivo de convertirse en un mejor ser humano.
Algunos autores hablan de 25 claves, otros de más o menos y cualquier postura es posible. En este caso, según el aprendizaje obtenido, lo he resumido en 8 claves que considero están presentes en alguna medida en cada uno de nosotros:
Clave # 1. Los líderes son descubridores de diamantes. Desarrollan la capacidad de ver más allá de las realidades físicas. Ven en los otros lo pueden llegar a ser y trabajan para lograrlo.
Clave # 2. Son buenos estudiantes. Mantienen una actitud de aprendizaje para tener el chance que las cosas salgan bien. Ante los retos diarios no se esconde, más bien los afrontan, no huye de ellos y los enfrenta con responsabilidad.
Clave # 3. Sonríen. Está comprobado que sonreír genera la producción de neurotransmisores cerebrales que alivian las circunstancias de la vida. Saben que la tristeza y la alegría se reflejan en la cara por ello sonríen y hacen sonreír. ¡Aprende a sonreír!
Clave # 4. Mantiene el enfoque. Saber planear la vida, determina el nivel de acierto, por ello siempre se reserva un tiempo para pensar, planificar y mantener el enfoque correcto. Definir cuáles son las prioridades es una tarea definitiva para el logro de los resultados.
Clave # 5. Es resiliente. Saben que la vida es como una montaña rusa, con altas y bajas. Por tanto, mantienen una actitud humilde y saben cómo afrontar los momentos difíciles y adaptarse a las adversidades para encontrar en ellas el lado positivo.
Clave # 6. Es coherente. Para ser eficaz en su tarea, desarrollan un mensaje ejemplar, un estilo de vida integro y tienen una fe digna de ser considerada por otros. Sabe que es un modelo para los demás.
Clave # 7. Sabe que batallas librar. Reconocen la importancia de debatir por opiniones, no por emociones, puesto que las emociones son fluctuantes, peligrosas e incluso traicioneras según las situaciones. Mantienen unas convicciones solidad que mueven su acciones y decisiones.
Clave # 8. No tiene agendas ocultas. Son personas integras en su actuar, saben tomar las decisiones correctas, en el momento correcto según los valores correctos, y no tiene nada que ocultar. Son transparentes, predecibles y mantienen la conciencia limpia.
Hemos sido creados para un tiempo específico y una oportunidad única. Ser conscientes de nuestra temporalidad lo cambia todo. Cada día que pasa es una oportunidad para dejar una huella y descubrir un diamante. Es un día para expresar el amor por nuestros semejantes.
Es mi deseo que estas claves te ayuden en el proceso de reflexión sobre el rol de liderazgo que ejerces. Si estás dispuesto y comprometido a mejorarlo, debes saber que tomara tiempo, obtendrás victorias y sufrirás algunas derrotas. Sin embargo, en el proceso de cocinar un líder, no hay cabida a rendirse o dejarlo por la mitad a riego que quede mal entrenado para su labor.
[/fusion_text][/fusion_builder_column][/fusion_builder_row][/fusion_builder_container]